martes, 19 de abril de 2011

Marta Meléndez en la Ruta de Quiñones.



El mundo de la cultura, el mundo sindical, asociativo, cultural, la gente anónima y también los políticos nos acompañaron durante la ruta, incluso Marta Meléndez se atrevió a participar con una lectura.

En su web, Nuevas Maneras, aquí.  En las fotografías la candidata a la alcaldía por el PSOE, Marta Meléndez, durante su intervención.


Personas lectoras en la ruta


Quizás por ser un hombre tan cercano, con el que casi todas las personas de Cádiz nos hemos topado en algún momento de nuestra vida, tan alejado de corrillos y de intrigas, nunca se le ha dado su lugar en la literatura.
Por eso la iniciativa de Blanca Flores y Juan José Téllez de reivindicarlo, con la realización una ruta por los lugares que frecuentaba, de la mano de sus textos, me pareció una idea magnífica y propuse la adhesión de la Asociación al proyecto. Estuvimos Gustavo, Paloma, Lola y yo.

Crónica completa en el blog de las personas lectoras, pinchando aquí. En la foto de Jap Peralta aparece Carmen Sánchez de la Asociación de Personas Lectoras de Cádiz.

sábado, 16 de abril de 2011

Quiñones y El lenguaje de la mar de Cádiz.







Con motivo de la Iª Ruta de Quiñones, Javier Osuna nos hizo llegar una colección de fotografías del año 1991. Año en el que Osuna junto a Erasmo Ubera publicaron El lenguaje de la mar de Cádiz. Un excelente diccionario naútico y muy nuestro. Como no podía haber sido de otra manera, el libro fue presentado en La Caleta y el maestro de ceremonias Fernando Quiñones. Hoy, recogemos ese recuerdo en este blog y las intenciones de Javier Osuna. Se constata como Fernando siempre entusiasta, mentor, maestro y animador, contribuía con empeño al desarrollo, a la investigación, a cualquier muestra cultural o de progreso para nuestra historia y nuestra ciudad.

"Os envío esta pequeña colección de fotografías para que queden depositadas en la Fundación Fernando Quiñones. Son pocas, pero les tengo mucho cariño. Fernando se ofreció personalmente a presentar este libro (El lenguaje de la mar de Cádiz) en septiembre de 1991. Me consta que le gustó el trabajo y siempre nos animó a ampliarlo. Espero que os guste esta humilde aportación.

Un abrazo a todos y enhorabuena por la magnífica iniciativa de la ruta, que ha desbordado todas las previsiones.

Javier Osuna".

jueves, 14 de abril de 2011

Coplas de Luis el Mula



LUIS El Mula tenía
—ay Pedro Romero—
una cabeza diminuta y larga
sobre unos hombros inacabables
como un higo de tuna encima de una cómoda.
Luis El Mula peleó en el mar
a brazo limpio con una corvina
de un metro y más. El pez estaba enfermo
o aturdido. Lo avizoramos
lejos, desde la playa. Luis corrió
al mar y media hora después, sangrientamente
arañado, feliz, algo mordido,
volvió con su corvina a las espaldas
(la cola le arrastraba por la arena).
Luis EL Mula me defendió, y a Antonio
Lloret, contra ocho o diez en la Lonja Chica.
L
o estábamos pasando fatal cuando escuchamos
el cloc-cloc de sus botos de madera
y en seguida el chocar de tres o cuatro
cabezas empujadas fácil, graciosamente por
un solo manotazo de Luis.
Las cajas de 100 kilos volaban por el aire.
Luis El Mula, también en el Muelle
Pesquero, boxeó un día de broma
con Hinestrosa —ay Pedro Romero—,
profesional muy fino que lo echó
al suelo casi antes de empezar.
Contra los adoquines y la nieve salada
daba susto la cara de Luis que ni se lo creía.
Hinestrosa huyó a todo correr.
«¡No corras, cabrón, ven p’acá!»,
voceaba Luis doblando con las manos
una tira de hierro entre
divertido y lloroso, «¡no corras!».
Luis El Mula en Jerez de la Frontera
(a 50 kms entonces)
y cuando peor andaban las postbélicas hambres
tuvo una amiga rica. El mayordomo
le ponía un pollo por la mañana
y Luis se lo comía en la cama
y otrosí sendos pollos
de almuerzo y cena: en diez o doce días
se comió el gallinero y volvió a Cádiz.
Luis El Mula fue amigo de uno
y quien me presentó a Eduarda,
esbelta rubita calentísima,
quien me ayudó a limpiar cajas y cajas de cabezas
de merluza y a aprovechar cachetes y cocochas,
quien me daba tabaco algunas veces.
Luis El Mula tenía
cinco ternos, siete corbatas
y una chaqueta espó.
Pero Luis El Mula se aburría, se aburría y se fue.
Pero Luis El Mula murió en el puente de Brookiyn, Nueva York,
tiroteado por la policía.

Nota: Las coplas de Luis el Mula, fueron leídas por Juan José Téllez, el 2 de abril de 2011, para abrir la ruta de Quiñones por Cádiz a las 10.30 de la mañana frente al muelle y a la puerta del bar Lucero.  En ese mismo momento Zapatero anunciaba que no se volvería a presentar a las elecciones generales.

La foto procede de la página de la Fundación Quiñones. Aquí.


martes, 12 de abril de 2011

Cádiz, la ciudad de Fernando Quiñones

Dolors Alberola en la jornada de Conclusiones

 



I love you, Fernando (Fotografía realizada bajoTorreTavira)
La capital es blanca y tiene enormes ojos por arriba.
Blancas torres vigías se distienden para observar elmar.
La calle Plocia, en cambio, desliza ciegamente su
trazado hacia abajo
y, en la panadería, aún puedes encontrar ciertos
picos,
con sal de blanco Cádiz -taza-, para roer un rato.

I love you, Fernando. Los dos huesos tan blancos de
corvina descolgados del cuello que mantuvo la estrecha
relación con la mujer castiza que me abrió el universo
de lectura. Esto es divertido, me dije aquella noche y
me puse a soñar. Los escritores son un mundo de magia,
pero, dentro, la magia se convierte en un mundo de
dimes y diretes. I love you Fernando con tu muñeca a
cuestas, importada por tí de la Chiclana eterna.
Muñecas de Chiclana pasean por Nueva York con peinetas
y chanclas.
“Esto es la modernez”, me dijo un cierto escritor de
Jerez. “O la osadez”
-nos dijo-, en tanto presentaba su revista de nadie,
pero siempre de alguien, vaya a ver: de nadie nunca es
nada.
Luego llegó ese otro que presentaba todo, y todo era
suyo o pretendía así.

I love you, Fernando, con tus sandalias vivas de andar
por la bahía de los vientos y yo, como una loca,
releyendo a la Hortensia de la sal que guarda todo Cái
en su entrepierna. I love you y bendito, mucho bendito
you y very well lo tuyo, y lo de tantos que mueren
asfixiados sin que nadie los suba hasta el rellano que
siempre merecieron.
Las calles de este Cádiz van a morir al mar: el amplio
océano que se acerca hasta el ficus, se detiene
mirando a ese balcón que mira y se miran constantes,
se comentan sobre aquella mojarra, el pescaíto, el
mosto de narices, las sardinas.

Bujarrones de Cádiz alzan nidos, bailaoras gaviotas
que, al pasar, arrastran crisantemos tras su sombra,
cristales de la sal contra la sal del mar, los
risueños sarasas, maricones, de lo mejor de España.
Las mujeres de Cádiz son más blancas contra la sal del
mar,
sus cuerdos cuerpos van tostando en la tarde,
hasta tocar -a dedo- el festivo color del chocolate.

La catedral, al vuelo, va alzando su cúpula hacia
terribles cielos bizantinos. Un ambiente de España de
Colón se abre, en la mañana, contra muros de noche que
recorres frente al Francia París.
En la mañana incluso, Raimundo va ofertando libros de
dos, de saldo,
poemas que tocaron los existencialistas.
Retales de Oscar Wilde, complicidades griegas de
Odysseo Elytis.
Blanco es Cádiz, esa ciudad tan próxima al estrecho,
tan valiente.

La verdadera valentía
hay que bautizarla en el mar
que traiga el rumor del efecio
a las enormes viviendas de vecinos
que abandone los campos de batalla
que crezca entre el amor y entre los libros
que aparezca con un nombre más hermoso
y se detenga allí
para expulsarla e insultarla
para atarla firmemente y juzgarla.
I love you, Fernando.

Desayuno en la plaza con Pilar, aparcado Platero en
las esquirlas de un viento de levante que nos come.

Dolors Alberola
En la foto de Jap Peralta: Dolors Alberola, Rosario Troncoso y Blanca Flores durante la clausura de las Jornadas Culturales del Parque de los Toruños en el que se realizó un balance de la ruta y bajo el reportaje fotográfico.


domingo, 10 de abril de 2011

Nadia Consolani entrevistada para Cádizbook


Por Macarena Jiménez Quevedo para Cádiz-Book. Una entrañable entrevista a Nadia Consolani, viuda de Fernando Quiñones, que en los últimos días vuelve a primera línea de actualidad, reivindicando la obra del escritor.

"Esta mujer italiana, de pausados giros, que diría Darío, viene de alta alcurnia. De alta alcurnia literaria, ya que es viuda de uno de nuestros mejores poetas, Fernando Quiñones; pero no sólo eso. Mucho más. Ella misma. Poeta, escultora, amante del arte y de gran sensibilidad. Me cuentan que es pariente de Giacomo Leopardi.  Ella tiene alcurnia, de la de dentro y la de fuera.

Nos ofrece su tiempo para hacerle unas preguntas con gran amabilidad, hablamos de la I Ruta Quiñones, celebrada el pasado sábado, nos habla de Fernando Quiñones, nos habla de ella, del arte, de la literatura. Y no podemos hacer otra cosa que rendirnos a sus anécdotas, a su sonrisa. Esto es lo que nos ha contado".

Entrevista completa a Consolani en Cádiz Book, pinchando aquí.
En la foto, Nadia Consolani, guapísima.


viernes, 8 de abril de 2011

Conclusiones en torno a la ruta Quiñonesca, en los Toruños


El sábado 9 de abril, organizado por Rosario Troncoso, tendremos un encuentro para recapitular en torno a la ruta de Fernando Quiñones por Cádiz. Será a las 17.30 horas.

Programa completo en la página web de la Consejería, pinchando aquí.

17:30 Homenaje a Fernando Quiñones. Lectura colectiva de textos. Balance de la I Ruta Quiñonesca por Cádiz, a cargo de Blanca Flores y Mauro Quiñones, impulsores junto a Juan José Téllez de la iniciativa.
          
 Concierto Acústico del músico y compositor Alejo Martínez.

Carta a un amigo que está de viaje.

 
 
Querido Fernando: Ochenta años no es nada, como diría el tango, y menos para ti que los has cumplido no hace mucho, y que te paseas por encima de nuestras miserias, a años luz de de este mundo, pero completamente en él gracias a tu literatura y al recuerdo que tu persona dejó en todos nosotros.
 
Quiero rendirte un homenaje que, a pesar de todo, no necesita de efemérides para demostrarte que te somos fieles en todo momento, porque somos muchos los que con nuestro trabajo cotidiano, calladamente, vamos difundiéndote un poco más cada día, siguiéndote como fieles adictos.
 
Para leer completa la carta, pincha aquí.  Por Amalia Vilches en La Voz de Cádiz. Profesora de Literatura y escritora.

jueves, 7 de abril de 2011

La ruta en el blog de Rosario Troncoso: El ático de los gatos.

 
Una marea de buena gente congregada para un bello fin, sin otro ánimo que el de pasear juntos, saludarse, compartir la inquietud por las letras, por la cultura, unidos por un hilo invisible de cariño sujetado, justo en ese extremo en que se funde con el infinito y se pierde en las olas, por las manos de un escritor genial, chiclanero y caletero, gaditano y sin fronteras, entrañable y al que todos extrañamos: Fernando Quiñones.
 
Accede al post completo del Ático de los gatos.
 

lunes, 4 de abril de 2011

domingo, 3 de abril de 2011

Seguimos en activo.


Fernando Quiñones va a seguir en las calles de Cádiz. Este blog va a seguir abierto para recoger adhesiones, críticas y propuestas. Porque hubo errores y fallos, aunque hasta éstos fueron maravillosos.

La acogida de la propuesta, ya hecha realidad nos obliga a empezar a plantearnos la segunda ruta.

El próximo sábado a las cinco de la tarde, en Los Toruños de El Puerto de Santa María, presentaremos las primeras conclusiones. Habrá más, amenazamos con volver, los gaditanos somos los más jartibles y no lo vamos a remediar.  

En la foto, procedente del diario El Mundo, del fotógrafo Cata Zambrano, un momento de la clausura. Junto al monumento al poeta Fernando Quiñones y de izquierda a derecha: José Pettenghi, Juan José Téllez, Fernando Quiñones, Nadia Consolani y Blanca Flores.

Crónica en Cádiz Book, aquí.

Así que continuad enviando todo lo que os parezca oportuno a: rutaquinonesca@gmail.com



ALEJO MARTINEZ también nos acompañó en el fin de fiesta



Hay mucha poesía en el disco de Alejo Martínez: El rumbo de tus pasos

.

Doscientas cincuenta personas siguen los pasos del paseante...









Por Pilar Vera en Diario de Cádiz.

"La iniciativa -que nace con la intención de recordar el peso exacto de las huellas de Quiñones cada primavera- se definió frente a la que fuera casa familiar del autor, en la calle Rosario Cepeda, con la lectura de un manifiesto "A favor de Quiñones": "¿Y quién iba a estar en contra -rezaba el texto- sino los bajancias, los malanges y el derrotismo en general". Un discurso que, al igual que el del propio escritor, no se queda en la complacencia sino que saca la uña. En él se incluyen iconos gaditanos, palpitantes o ya perdidos -como "el cine Caleta y el trolebús de San Severiano"- pero también se apunta que Cádiz "sólo sonríe cuando sueña con su pasado".

 
Crónica completa, en Diario de Cádiz, pinchando aquí.


Personalidades de la cultura, de la ciudad y cientos de anónimos ciudadanos que son los que de verdad han hecho posible y realidad este sueño. 

Fotos de Camen Sánchez en las que aparecen algunos de los participantes, tantos ciudadanos, Kiko Butrón, Meche Pons, Pepe Maestro, Miguel Ángel Gacía Argüez, Alfonso Baro, Paloma García, Carmen de la Jara, Inma Torrens, La Canalla, Alejo Martínez... seguiremos con la galería... y con la lista de colaboraciones, participaciones...

Las fotos son de Mari Carmen Sánchez del colectivo de personas lectoras de Cádiz.



 

Cadiz recorre a Quiñones, en La Voz de Cádiz.

 


Por la periodista Rocío Vázquez en La Voz:
 
«Estoy seguro de que a Fernando le gustaría que hoy, y aquí, un don nadie como yo le rindiese este homenaje». El responsable de esta humilde sentencia, Kiko Butrón, terminaba así su tributo a Quiñones. Subido a un palco de la plaza del Palillero, el cuentacuentos resumía en cinco minutos 40 años de historia. Historia gaditana narrada con ironía y derroche de sentimentalidad. El recuerdo así lo merecía. Estaba nada más y nada menos dedicado a un genio de Chiclana, gaditano universal. En este caso, se contaba la labor de Quiñones al frente de la organización del I Festival de Alcances, hoy el cuarto más longevo de España. «Todo era distinto entonces. Los coches no corrían a más de 100 km/h, como ahora. Los políticos eran corruptos y cortaban la libertad de expresión, ah, como ahora», bromeó Butrón para robar la enésima sonrisa del público. Mejor dicho, asamblea. Formada por más de un centenar de personas en algunos puntos del recorrido. Misión cumplida. Éxito rotundo de la convocatoria de la I Ruta Quiñones por Cádiz, una iniciativa popular con la poeta y bloguera Blanca Flores y el escritor Juan José Téllez al frente.
 
 
La foto es de Hans-Josef Artz, miembro del Ateneo de Cádiz.
 
 
 
 

Fernando se merece esto, Cádiz también.



El día de ayer, será para siempre inolvidable. Ese homenaje y reconocimiento anónimo a la figura de Fernando Quiñones estuvo plagado de emociones, de anécdotas, de momentos... Ayer le hicimos un regalo a Fernando porque era hora, pero ayer también le hicimos un regalo a Cádiz.

A todos y a todas... a tantos como de una u otra manera tuvieron algo que ver con todo esto no queda más que agradecer lo que hicieron. Compartir su tiempo, madrugar, aplaudir, o simplemente ayudar a difundir de una u otra manera esta iniciativa que nace de la ciudadanía, no tiene precio. Habrá más, porque tiene que haber más Cádiz, habrá tiempo y momentos para todos los que quieran seguir apuntándose... Esta simplemente ha sido la primera. Nada más y nada menos...

En el vídeo el grupo de Tino Tovar, otro que ayer emocionó y se emocionó, como tantos.

Viva Cádiz, viva Fernando...


La ruta en El País, por Pedro Espinosa.



Huele a café frente al muelle. "A mi padre le gustaban los bares porque rezuman humanidad". Mauro, hijo del escritor Fernando Quiñones, cree acertado que la ruta inaugurada ayer arrancara en el Lucero, un emblemático establecimiento hostelero frente al puerto de Cádiz. La iniciativa, que quiere perpetuarse en el tiempo, ha nacido de algunos de sus amigos y admiradores, como Juan José Téllez o Blanca Flores. "Queremos reunirnos los que le conocimos y darlo a conocer a los que todavía no saben de él", explican los organizadores. La ruta empezó en un bar y terminó en una peña flamenca.

Café y gaditanismo, por los cuatro costados.  Artículo completo en El País, desde aquí.


sábado, 2 de abril de 2011

Mi mentidero

En el blog de Fermín Aparicio, otra crítica sobre la ruta. Un madrileño que está volviéndose gaditano hasta en la ironía....

Para acceder al post que sobre la ruta aparece en mi mentidero, pincha aquí.

Muchas de las fotos que aparecen en este blog de la ruta, son de Mari Carmen Sánchez, del colectivo de personas lectoras de la provincia de Cádiz.

La ruta en el baile de los Silenos.


Gente, gente y más gente (unos ciento veinte, según los organizadores(al principio); unos trescientos, según la policía).

Hubo momentos en los que hubiésemos cabido en los sitios elegidos... Pero lo cierto es que ha habido muchas personas que han secundado la ruta de Quiñones.

Antonio Serrano Cueto, en su blog: El baile de los Silenos, analiza la ruta. Participaciones, emociones... maravilla.

Para leer su post, pincha aquí.

Evidentemente, en las fotos no cabían todos ni todas...

Levante en calma, la ruta en El Mundo

Paseos, poemas, flamenco, carnaval y arenques han sido algunos de los ingredientes de un sentido homenaje a un chiclanero que se convirtió en alcalde de la playa de una ciudad que tiene pendiente rendirle el tributo que se merece.
El reconocimiento llega de la mano de los ciudadanos, de los que le conocieron y de los que no tuvieron tal placer. Al margen de subvenciones y organización institucional, desde primera hora de la mañana de este sábado ha quedado inaugurada en Cádiz la I Ruta Fernando Quiñones.

Más en el Mundo por la periodista gaditana Ana Fopiani, pinchando aquí.

Nada ha cambiado...


LIBRE DIRECTO

Siete años

No, no y no. No sólo era un buen escritor. Me refiero a Fernando Quiñones. Me revienta la imagen tópica y blandita de “aquel gran escritor y gaditano”.

Ni se cumple aniversario, ni están a la vista exhumaciones literarias, ni hay asomo de necrofilia: parece que fue antesdeayer, pero hace casi siete años que se murió, y también me he acordado de él. Fernando ya no está aquí, pero debería estar. Los gaditanos nos lo merecemos y la ciudad lo necesita. Cádiz precisa de aquel tipo incómodo, aquel testigo tan poco complaciente, que no se arrugó ante la vida y que le cantó las cuarenta a los/las poderosos/as de cuello duro y cara aún más dura.

¿Qué pensaría Fernando Quiñones de lo que ha pasado en su ciudad en estos siete años? Fernando detestaba el concepto “gadita”; hoy se ha sacralizado, junto a algunas bobadas aldeanas como esa de que los gaditanos nacen donde quieren y otras de ese nivel intelectual. Fernando opinaba –y eso le causó más de un disgusto– que si las energías que Cádiz empleaba en fiestas locales (no especifico por precaución) las usara en favorecerla de verdad y no de boquilla y con grandes aspavientos, otro gallo nos cantaría. Hoy el gallo sería el mismo pero con gripe aviar. Fernando no pudo ver realizada su ilusión humanista de la ciudad mancomunada de la Bahía. Ni ahora, ni cuando las ranas críen pelos. Mientras, los/las poderosos/as de cuello duro y cara pétrea se han puesto fanegas; es lo que tiene la buena vida.

Lo que parecía inverosímil e imposible, se acaba convirtiendo en monstruosa realidad. Sobre todo si se va imponiendo poquito a poco, gradualmente, de modo que a aquel que dio los primeros gritos de alarma se le acusó de aguafiestas, de catastrofista o de poca “gaditanía” (el término es de lo más paleto que se despacha).

Se corre el riesgo, me dice Fernando al oído, que lo que ha sido tu tierra se convierta tan sólo en tu lugar de nacimiento. ¿Qué pensaría Fernando del electroencefalograma plano de su ciudad? ¿Qué opinaría de su dócil y aborregada vida pública? Él, que se hizo escritor por puro sentido de justicia, que estuvo más allá de la corbata, los canapés, los fastos y también de la vanidad, que es la versión cutre de la soberbia legítima de todo escritor. Un día me dijo: “mira Pepela, el que escribe pa comer, ni come ni escribe”.

Fernando flageló a los gregarios, a la pasividad, a los sumisos. Hoy hace falta para que sacuda la caspa a los que ridiculizan la cultura como algo aburrido y elitista, a los que creen que la cultura es un Ministerio, a los que confunden pueblo con muchedumbre, a los que tienen la cultura como asignatura maría de los programas electorales, a los que se han olvidado que cultura es construcción social...

Hoy hace falta Fernando Quiñones. Que además era un gran escritor.

José Pettenghi Lachambre

Adhesión de Julio Malo de Molina

Hola Blanca, soy Julio Malo:

Por supuesto que salvo causa de fuerza mayor estaré mañana junto a tan
estupendos cronopios y famas, en espacial, Nadia, Mariela y mi gran amigo
Juan José. Recordar con vosotros  tan estupenda persona y excelso poeta es
medicina para el espíritu y goce para los sentidos.

Naturalmente, si por cualquier razón no pudiera desplazarme a Cádiz,
contad con mi adhesión de todo corazón. Fernando era uno de mis mejores
amigos y mi poeta preferido. Él ya no está, pero nos quedan sus relatos y
sus poemas, y el recuerdo de su entrañable bondad, muestra evidente de la
identidad entre verdad, bondad y belleza de la cual nos habló Platón.
Siempre vuestro, Julio Malo de Molina.


El Cádiz de Quiñones



LA primera vez que le vi fue en La Caleta, con un bañador hortera, de esos del Piojito. Era la imagen de un hombre espigado, tirando a Quijote, que recogía papeles y botellas mientras paseaba por la arena en una época en la que la palabra ecología aún no estaba en el vocabulario de la mayoría de los gaditanos ni mucho menos en el de los caleteros. Poca gente allí sabía que se trataba de un escritor de renombre. A muchos les parecía un excéntrico por recoger lo que otros tiraban con esa costumbre tan gaditana de pensar que por hacer eso ya cobran otros.

En pleno verano, cuando pocos piensan en cultura con mayúsculas, él organizaba en el Club Caleta conferencias sobre distintos asuntos, mayoritariamente de literatura. Entre el peculiar público que allí se reunía andaba yo, que en esa época le llegaba a la cintura.

Años después, fui a que me firmara el libro La Canción del Pirata y me lo adornó con su particular firma, la mojarrita de tres colores.

Por Paloma García en Diario de Cádiz. Pincha aquí.

Adhesión de Caballero Bonald


Querido Juanjo:

No podré intervenir en esa memoria gaditana de Fernando Quiñones. Pero estaré paseando
con él y con todos los amigos por las calles que constituyen de hecho uno de nuestros escenarios fundamentales. Estaré presente desde aquí en esa ruta.

Cariñosos abrazos.
Pepe Caballero Bonald


(La fotografía procede del estudio de José Antonio Hernández Guerrero y María del Carmen García Tejera: Poetas andaluces de la Generación del 50).

MANIFIESTO A FAVOR DE FERNANDO QUIÑONES


¿Y quién iba a estar en contra sino los bajancias, los malanges y el derrotismo en general?  Nosotros, estamos a favor de Fernando Quiñones, de Cádiz y sus cantes, de las mijitas de freidor y de las mil y una noches de Hortensia Romero. No queremos que se pierdan como el tango gaditano, el submarino amarillo en primera, el cine Caleta y el trolebús de San Severiano.
Queremos que Fernando Quiñones perviva en la memoria de todos, pero sobre todo en la memoria de una ciudad que también fue Fernando Quiñones. Piedra ostionera y callejón de los piratas, bocas de la isla, qué ricas bocas, ciclistas del amanecer por la carretera de Chiclana, coro a dos voces de coplas viñeras y película subtitulada en los cineclubs de la libertad.
En esta casa vivió y esta ciudad no podría vivir sin su memoria, sin su paso transeúnte por las calles del tiempo perdido, sin sus ojos abiertos frente a un Cádiz que sólo sonríe cuando sueña con su pasado.
Están sus libros, claro, sus poemas, sus relatos, sus novelas, sus ensayos, sus artículos en el diario y sus eternas conferencias a veces como breves telegramas del flamenco. Pero Fernando Quiñones no sería nada sin Cádiz, lo mismo que Cádiz sería menos sin Fernando Quiñones.
Por eso estamos a favor de que se encuentren, al menos cada año cuando llegue la primavera. Que Quiñones salude respetuosamente a la señorita del mar y la señorita del mar, que ya está entrada en tres mil años, le mire como un hijo prodigo que siempre vuelve a ella.
En el fondo, claro, es un manifiesto a favor de nosotros mismos. ¿Qué sería de nosotros sin ese Cádiz crónico, qué sería de nosotros sin la salada claridad de Fernando Quiñones? Recorriendo sus calles llegaremos a Fernando. Recorriendo sus palabras, llegaremos a sus calles. Y en uno y otro caso quizá lleguemos al remoto laberinto de nuestros corazones.
Viva Cádiz, Viva Fernando Quiñones.

Por Juan José Téllez y firmantes.


(La fotografía de una noche de verano en Zahara de la Sierra, en la que Fernando se arrancó por siguiriyas, procede del blog de Enrique Montiel)

Colaboraciones en torno a Fernando con motivo de la Ruta


Fotos para el evento de Hans-Josef Artz


"Bajo la luz" de Alfonso Baro

Pirata caletero de poniente
Izaste las velas de la poesía
Defendiste bravío e insolente
La costumbre, el rito y la letanía
El canto de sirenas no te distrajo
Tus raíces paseaste por dos orillas
La orilla de tu Cádiz, red y trasmallo
La orilla de otros mundos en la lejanía.

Y bajo la luz, la luz del Sur
Esa que brilla en tus ojos y el mar azul
Y a contraluz, y a contraluz
Vuelas en la brisa marina
Al son de un tango
Duende andaluz.

De salinas y esteros tu sangre presa
Que el sur también existe esa es tu esencia
Que brota de tu prosa, radiante, impresa
Que abunda de sentires y huye de sentencias
Que solo quiero naufragar en los mares
Donde el pirata canta sus aventuras
Esas que narras y de las que siento las sales
Y que me llevan a lomos de la ventura.

Y bajo la luz, la luz del Sur
Esa que brilla en tus ojos y el mar azul
Y a contraluz, y a contraluz
Vuelas en la brisa marina
Al son de un tango
Duende andaluz.

No rehúyes del chiste y la cuchufleta
Que el garbo gaditano tu demostraste
Entre las mil noches de esa, tu Hortensia
La tolerancia y respeto, tú nos mostraste
Retazos de tus crónicas me embelesan
Me llenan de América, de Mar y Tierra
De Al Andalus hasta la fragua Porteña
Desde Hispania Romana hasta Filadelfia.

Y bajo la luz, la luz del Sur
Esa que brilla en tus ojos y el mar azul
Y a contraluz, y a contraluz
Vuelas en la brisa marina
Al son de un tango
Duende andaluz.




viernes, 1 de abril de 2011

Mapa y Cronograma de la Ruta


El próximo sábado día 2, a las 10,30 horas, nos concentraremos junto al Bar Lucero para dar comienzo a este viaje al corazón de Cádiz y de Fernando, con el siguiente itinerario y horario más o menos flexible:
10, 30 horas. Junto al bar Lucero, frente al muelle de Cádiz, Juan José Téllez da lectura al poema “Coplas de Luis El Mula”.

11,00 horas. Acceso a la Iglesia de Santo Domingo. Montse Torrent interpreta un fragmento de “La Nardi”.

11,30 horas. Café Teatro Pay-Pay. Paloma García interpreta un relato de Fernando Quiñones y Carmen de la Jara canta por alegrías “Arco del Pay Pay”.

12,00 horas. Callejón de los Piratas. Pepe Maestro rinde homenaje a Juan Cantueso.

12,30 horas. Callejón San Juan. Portal del antiguo Salón Moderno. Miguel Ángel García Argüez lee un poema de “Muro de las hetairas, también llamado libro de las putas o de la afición tanta”, de Fernando Quiñones.

13,00 horas. Mercado central. Puesto número 171. Pescadería y mariscos de Leo Hernández. Lectura de un artículo sobre los pescados de Cádiz, de Fernando Quiñones por Charo Troncoso. Una carta de Fernando, por Josefa Parra.

13,30 horas. Plaza del Palillero. El cuentacuentos Kiko Butrón rinde homenaje a Alcances.

14,00 horas. Calle Rosario Cepeda. Junto al domicilio de Fernando Quiñones. Lectura de un manifiesto reivindicativo de su figura, por Blanca Flores. Palabras de sus familiares.

14,30 horas. Calle de la Palma. La agrupación de Tino Tovar interpreta un pasodoble dedicado a Fernando Quiñones.

15,00 horas. Estatua de Fernando Quiñones, obra de Luis Quintero, junto a La Caleta. Ofrenda de arenques con lectura de un texto por parte de José Petthengui.

Peña Juan Villar. Fin de fiesta con actuación de Chipi y Javier Galiana de “La Canalla” y de Alfonso Baro, que interpretará una canción creada a propósito de esta marcha. También intervendrán todos aquellos que deseen hacerlo.

La personas que quieran intervenir en el final de la ruta deben comunicarlo a:
rutaquinonesca@gmail.com

Procedencia del mapa: La Voz de Cádiz.

La ruta vista por Enrique Alcina y sus alternativas.... Aquí.




Cádiz, Nadia Consolani, Fernando Quiñones...

 
 
«Como le quiero y admiro muchísimo, pienso que no se le conoce lo suficiente». Nadia Consolani, la viuda de Fernando Quiñones, se mostró ayer muy emocionada con la organización de esta ruta. «Voy a disfrutar muchísimo porque él me enseñó a amar a Cádiz, para él esta cita habría sido un puntazo», bromeó Consolani. Orgullosa, animó a todos los ciudadanos a participar de este encuentro y elogió a una ciudad y sus gentes, a las que, reconoció, había encelado en vida del autor. «Durante un tiempo fue mi suegra, después fue su regalo. Admiro la chispa mental de aquí, tan importante para vivir felices a pesar de los sinsabores», subrayó.
 
Recogido por la periodista Rocío Vázquez para la Voz de Cádiz.
 
La foto que procede del archivo de la Fundación Fernando Quiñones, es de la boda que celebraron en Milán.
 
 

Homenaje al alcalde de la Caleta.


"Hoy día, parece imposible imaginar un Dublín sin Bloomsday o un Londres que no siga los pasos de Sherlock Holmes. De los muchos Sherlock Holmes. Y es imposible  -en código literario- pensar en Quiñones sin pasear por Cádiz, o pasear Cádiz sin pensar en Fernando."Es difícil encontrar mejor autor que Fernando para dibujar una ruta de la geografía urbana de Cádiz", apuntó ayer, en la presentación de la que será I Ruta Quiñones por Cádiz, Juan José Téllez.

El escritor estaba acompañado por la viuda del poeta, Nadia Consolani, y la "inspiradora" del encuentro, la socialista Blanca Flores. Una cita que tendrá lugar el próximo sábado, abierta a todo aquel que desee unirse y que nace con voluntad de "continuidad". Así, se pretende que "cada primavera", "poetas, artistas y gentes del mal vivir puedan tener la palabra", continuó el autor".
Más, por la periodista Pilar Vera en Diario de Cádiz.